

La Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT), mediante la Dirección General de Autotransporte Federal (DGAF), dejó claro que las plataformas de transporte como Uber no cuentan con autorización para operar servicios de pasajeros desde y hacia los aeropuertos del país, priorizando exclusivamente a los taxis autorizados, servicios turísticos y autobuses con permisos específicos.
En un comunicado oficial, la SICT enfatizó que "los servicios que se brindan a través de las empresas de aplicación no cuentan con autorización expedida por la Secretaría para prestar estos servicios de transportación". Esta posición surge en medio de operativos realizados por la Guardia Nacional en diversos aeropuertos, donde se ha detectado la operación irregular de estas plataformas.
Uber, una de las empresas afectadas, promovió un amparo contra estos operativos. El Juzgado Décimo Tercero en Materia Administrativa de la Ciudad de México otorgó una suspensión provisional a la compañía, con el fin de que las acciones de la Guardia Nacional se ajusten estrictamente a la Ley de Caminos, Puentes y Autotransporte Federal y su reglamento correspondiente. Esta medida busca evitar operativos "arbitrarios y discriminatorios", pero no implica en absoluto una autorización para que Uber u otras plataformas presten servicios en aeropuertos.
La SICT recomendó a los usuarios continuar utilizando las opciones legales disponibles: taxis autorizados dentro de los terminales aéreas, servicios turísticos con permisos y autobuses destinados a puntos específicos. Con esta decisión, el gobierno federal refuerza el control sobre el transporte en zonas federales como los aeropuertos, privilegiando a los operadores con concesiones oficiales y dejando en el limbo a las apps de movilidad.






















